Por Pablo Barrera (Entrevista) / imágenes e información de Brenda Monzón.

Brenda Monzón, con una herencia familiar artística, gestora cultural, poeta, actriz, locutora, directora de FILIJC, relacionista pública, periodista, etc. Nos ha concedido una entrevista para conocerla un poco más. Esperamos les guste:

¿Con tanto legado y tanta trayectoria, cómo se describe a sí misma Brenda Monzón?

Me siento privilegiada de tener acceso a muchos temas humanos que alimentan el espíritu. Soy una mujer en constante aprendizaje y crecimiento, una persona a la que le encantan los retos, que lucha con todas las fuerzas para alcanzarlos, soy una mujer que le gusta compartir con la gente a través del arte y la cultura. Tengo carácter determinante, no me gustan las cosas a medias, tengo mucha fuerza de voluntad y disciplina. Puedo perder fácilmente la atención en algo si no me parece interesante. Me gusta conversar de muchos temas, detesto la hipocresía y la doble moral.

Coméntanos del lugar en donde te criaste y cómo recuerdas esos años.

Me críe en la aldea Lo de Hernández, en Huehuetenango, a unos 20 minutos caminando del centro de la ciudad, en el lugar había pocas casas. Inicia un cerro al pie de los Cuchumatanes, teníamos kilómetros de kilómetros de montaña donde barraqueábamos, explorábamos, subíamos árboles, fue una infancia muy sana, con mucho compartir con la naturaleza, tenía pocos amigos, así que me llevaba cuadernos y libros para dibujar, leer o escribir cosas que se me ocurrían.

Sabemos que el gusto por la literatura lo heredaste de tu papá José Ernesto Monzón Reyna, gran investigador en temas de literatura, música y con basta experiencia académica ¿Cuáles fueron los primeros libros que tu padre te compartió y que te motivaron a iniciarte en este ámbito?

Son varios, pero de los que tengo memoria cuando yo estaba muy pequeña: Azul de Rubén Darío, libros de José Martí, algunos de Pablo Neruda, poemas de Sor Juana Inés de la Cruz, Gabriela Mistral, entre otros.

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Llevas varios libros publicados, ¿Cuáles te han marcado más y cuáles son tus proyectos a futuro en la literatura?

Me han marcado todos, pues no es nada fácil publicar en Guatemala, y yo era muy joven, mi primer trabajo literario fue en formato de disco, me encanta “Mujer de trigo, tierra y agua”, mi primer libro impreso lo publiqué hasta en al año 2011, en 2015 publiqué mi primer serie de cuentos infantiles, muy especial pues son cuentos que salen de temas cotidianos de mis hijas, este año hice la reedición de ese libro, también publiqué en formato digital el cuento biográfico de mi papá, y más adelante me gustaría hacer un libro de poesía romántica. 

¿Cómo recuerdas la experiencia de trabajar en radio?

Maravillosa, empecé con 17 años, todo un privilegio, en ese entonces la radios FM era un boom, no había todas estas plataformas digitales que ahora hay, así que había muchos oyentes y los locutores solíamos ser considerados estrellas en nuestras localidades.

Sabemos que eres actriz de teatro ¿Cómo te iniciaste en ello y qué gratificaciones te ha dejado así como las obras en las que has participado?

En el año 1996 estudié en la Escuela nacional de Arte Dramático, ENAD, compartí con muchas personalidades de las tablas de Guatemala, continué en 1998 en Radio Teatro de TGW, y Roberto Santandrea, que era Director del Teatro España, me llamó para participar en 3 de sus obras, en una de ellas fui estelar, un papel que me aprendí en 3 noches, ensayando solo con él, quien me daba el pie de todos los demás actores, fue muy gracioso, porque nunca ensayé con los demás.

Asociación Danta Guatemala es parte importante de tu legado, coméntanos ¿Qué representa para ti? Así mismo de esta Asociación ha nacido la Feria Internacional de la Lectura Infantil y Juvenil de Centroamérica, FILIJC, cuéntanos ¿Cómo ha sido ese recorrido desde que ha iniciado hasta ahora y qué sentimientos te ha dejado a lo largo del camino?

Danta Guatemala es mi proyecto de vida, después de trabajar por muchos años temas educativos, culturales y literarios, de tocar puertas, de rogar para que me pusieran atención, decidí fundar una institución con personería legal, donde yo tuviera libertad para tomar decisiones y hacer las cosas, una institución donde, además de ponerla al servicio de la población, yo pudiera estar activa por el resto de mi vida, sin pensar que en algún momento se termina mi contrato y me dicen adiós.

Tengo muchos sentimientos de satisfacción, los primeros años fueron en extremo difíciles, pues trabajar sin patrocinios es muy duro, sin un centavo, generar desde 0, aprendimos a ser creativos y autosostenibles, no esperar que las cosas dependan de otros para hacerlas. Han sido años de aprendizaje, nos ha hecho trabajar una red de aliados en Guatemala y varios países.

¿Qué proyectos han surgido tanto de Danta como de la Feria?

En Danta Guatemala ya hemos organizado 3 conciertos, dedicados a distintos músicos de Guatemala, los hemos realizado en diferentes espacios, en el Teatro de don Juan, En el Teatro de Cámara del Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, en el paraninfo Universitario USAC, en el Mercado de Artesanías de la zona 13, son gratuitos al público y solo pedimos víveres que hemos ido a entregar a distintas comunidades de Guatemala. 

Ha nacido la Feria Internacional de la Lectura Infantil y Juvenil de Centroamérica, nuestro proyecto punta de lanza, exitoso, a pesar de no tener recursos, lo hemos logrado por muchos amigos que confían en el trabajo, ya se han hecho 5 ediciones, y ahora será la 6ta edición, hemos logrado trabajar en Centroamérica, con apoyo de 15 países.

También las salas de lectura, espacios de lectura que funcionan a través de voluntariado, nosotros donamos el primer lote de libro y damos asesorías, y los voluntarios comparten libros con el público algunas horas a la semana.

En 2017 surgió el primer ECLIJ, Encuentro Centroamericano de Literatura Infantil y Juvenil, anteriormente se habían hecho encuentros de escritores, pero nunca de literatura infantil y juvenil, era la primera vez, donde no solo se reunían escritores, también editores, ilustradores, narradores, y más, de esa cuenta se han hecho 4 ECLIJ, 3 de ellos los hemos organizado desde Danta Guatemala.

Surgieron los “Diálogos Centroamericanos de Literatura Infantil y Juvenil”, diálogos en línea a través de la virtualidad y redes sociales, donde convocamos a 2 o 3 expertos por cada país, hablando de la historia de su literatura, sus fortalezas, las debilidades, y hemos encontrado que compartimos las mismas necesidades, atravesamos los mismos problemas, nos reconocemos como hermanos centroamericanos.

Otro gran proyecto inicia ahora en junio, dimos el salto, Danta Guatemala y la FILIJC, firmaron una alianza legal con la Universidad de los Llanos del Pacífico, en la provincia de Penonomé, Panamá, donde, en ocasión del Bicentenario de la Independencia de Centroamérica y Panamá, se dará la: Cátedra Centroamericana de Literatura Infantil y Juvenil, la cual contendrá varios diplomados, se impartirá en línea, avalada por la UDELLPA, y pueden participar desde cualquier país del mundo.

¿Cómo ves el ámbito literario en Guatemala y cómo percibes su cambio a lo largo de estos años?

Guatemala es un país difícil para la literatura, desde las políticas del Gobierno donde se le da poco o nada de inversión al tema, no hay estímulo para editoriales pequeñas ni medianas, ni para nuevos escritores ni consagrados, aquí cada quien sobrevive con uñas y dientes, defendiendo su trabajo. Se ha avanzado poco, con un país con una de las mayores tasas de impuestos para temas del libro y la materia prima con la que se elaboran, sin una ley de libro que responda a las necesidades reales, beneficiando al sector del libro y la cadena de producción, no solo privilegiando a unos cuantos.

Entre eso, también no ayuda mucho que hay mucha división, muchos grupos, que no dan espacio a que otros tengan acceso, y puedan optar a los pocos espacios o beneficios que se logran, hay mucho ego en el ambiente y se pelean muchas cuotas de poder.

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¿Cuál es el momento más peculiar que has vivido en toda tu carrera?

Quizá ir a pedir dinero con alcancías junto con mis hijas para poder reunir lo necesario y pagar el salón de la feria, de verdad eso fue muy duro porque eran días de mucho trabajo, horas bajo las inclemencias del tiempo, yo me preguntaba: Brenda, ¿en realidad esto vale la pena?, y sí, sí valió la pena.

¿Qué otros proyectos tienes a futuro?

Muchos, no solo en al ámbito literario, tengo un programa en IG que se dedica a temas de parejas, quiero hacer más contenido para mis redes sociales, contenido de diferentes temas, desde tomarme fotografías que me agraden, dar tips de cómo armar proyectos y ser autosostenibles, cápsulas culturales, publicar otros libros, y bueno, a esperar qué se me ocurre.

¿Cómo recuerdas a tu padre José Ernesto Monzón Reyna, sobre todo por su legado musical de canciones para los departamentos del país y como hija también?

Lo recuerdo como un hombre dinámico, carismático, sencillo, humilde, activo, amoroso, creativo, una capacidad bárbara de asombros y de encontrar cosas hermosas en escenas cotidianas, y pasmarlas de forma sencilla en poemas y canciones.

¿Qué mensaje te gustaría brindarle a nuestra audiencia?

Nunca se conformen con lo que tienen, sáquenle provecho a su vida, amen, lean, caminen, hagan amistades, conversen, piensen e ideas y construyan a partir de ellas, vivan felices.